martes, 27 de mayo de 2014
viernes, 4 de abril de 2014
No quiero perderte
-Genero: Yaoi
-Pareja: Hyukbin
Los personajes mostrados no me pertenecen, solamente la historia.
Pov Hyuk:
Era un día como cualquier
otro, yo estaba sentado en mi silla favorita cerca de la ventana que daba al
patio de mi vecino, mirando como las hojas naranjas caían al suelo, adentrado
en mis pensamientos me recosté en aquella silla y me deje llevar por el sueño,
cayendo dormido.
Cuando desperté froté mis
ojos con cuidado y pude visualizar una sombra fuera de mi ventana, parecía ser
un chico que jugaba con algo en el jardín, pero… eso era imposible, hacía mucho
tiempo que nadie se acercaba o vivía en esa casa.
Me froté nuevamente los
ojos para poder ver bien de quien se trataba. El chico se volteó hacia mí y con
una amplia sonrisa hizo una seña diciéndome que vaya a su encuentro. Me quedé impactado
cuando por fin pude ver su rostro… era él…
“¿Pero
qué hacía ahí? ¿Por qué estaba ahí?”
Rápidamente me levanté y
salí casi corriendo de mi habitación, no podía creer lo que había visto, mis
piernas temblaban y no respondían bien a lo que yo quería. Cuando llegué al
jardín me paralicé al verlo esperándome como siempre, poco a poco se acercó
diciéndome – Hyukie, ¿Estás bien?– me sonrió y esperó mi respuesta, a lo que yo
simplemente llegué a decir – Hong…bin… - se acercó más, pero esta vez con una
cara de preocupación
-¿Te… encuentras bien?
Parece como si hubieras visto un fantasma – Me dijo nuevamente y yo solo pude
moverme para poder darle un abrazo, y es que era increíble verlo ahí, él
correspondió a mi abrazo y soltó una pequeña risa.
Cuando escuché que alguien
llamaba mi nombre abrí los ojos y no sabía dónde estaba – ¡HYUK! ¡HAN SANGHYUK! ¡¿Qué
haces durmiendo ahí?! – Era mi mamá en la puerta de mi habitación – Rápido arréglate, debemos ir al velorio –
Todo había sido un sueño… Pero parecía tan real, en serio extrañaba a mi mejor
amigo… Hongbin.
Me puse el terno que usé en
mi graduación, el día más triste de mi existencia al parecer, me dirigí al auto
de mis padres y en el camino volteé a ver la casa desolada, la cual los padres
de hongbin dejaron para olvidar la pérdida de su menor hijo. Me subí al auto y
partimos, en el camino volví a caer en mis pensamientos y volví a pensar en mi
mejor amigo, en aquel día de graduación, el último día que me dirigió la
mirada, y es que después de ese día nadie supo de él. Yo solo me preguntaba…
“¿Qué
estaba haciendo ahora? ¿Por qué desapareció de un día para otro? Y lo más
importante ¿Por qué no me dijo nada a mí? Yo soy su mejor amigo se supone que
confiábamos en el otro, si tenía un problema pudo habérmelo dicho”.
Al llegar a nuestro destino
vi como algunas personas estallaban en llanto, genial… el mejor ambiente para olvidarme de mis preocupaciones.
-Sanghyuk, iremos a saludar
a los padres de Hongbin - dijo mi padre marchándose con mi madre.
“Ahhh…
Se me olvidaba, era el velorio del abuelo de Hongbin. Por lo menos él debería
estar aquí verdad? Siendo su ultimo abuelo, el debería… Quizás… él esté aquí
para despedirlo - Sentí un pequeño dolor al tener la
esperanza de verlo una vez más aquí - ¿Qué
estás pensando hyuk? Eso es imposible, además ya pasó casi un año desde que lo
reportaron como persona perdida… Que apareciera de la nada sería casi como un
milag-…”
Me detuve en seco cuando vi
a lo lejos el perfil de alguien familiar, era casi como en mi sueño, pero esta
vez me decidí a correr con todo lo que pude, esto debía ser en verdad un
milagro y no estaba soñando… esta vez no era un sueño… era la realidad, cuando
volví mi mirada a aquella persona ya no estaba ahí.
Recuperé el aliento y
suspiré profundamente - ¿Qué me está
pasando? No solo el sueño ahora también alucinaciones… Esto es grave. Debo
dejar en el pasado todo lo que tenga que ver con Hongbin… Sí eso haré... Ya fue
suficiente de vivir en el sufrimiento-.
Después de ese largo y
cansado día volví a mi habitación y me recosté en mi cama, “ya decidí olvidar a Hongbin y eso haré, ahora…
será mejor que duerma, mañana debo ir a la universidad… ahh~”.
En mis sueños vi a alguien
sentado en una silla en medio del parque, vi sus labios moverse y decir algo
mientras tenía una sonrisa triste… Pero no logré oír lo que decía, o ver quien
era.
Al despertar sentí un dolor
agudo en la cabeza, me levanté como siempre y me dirigí a la universidad por la
misma ruta de ida y regreso – A volver a
la misma rutina – pero esta vez dejare las tristezas atrás.
Al llegar se me acercó un
compañero gritando - ¡RÁPIDO! VEN ESTA ES TU OPORTUNIDAD! – me agarró del brazo
y me llevo corriendo a ver un anuncio en el tablero.
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-Debes estar bromeando ¿no? – Miré a mi compañero un tanto
incrédulo, él me sonrió diciendo – ¡Vamos
amigo! Tú eres bueno en el baile, que te parece intentar esto, no pierdes nada
o ¿sí? Además dijiste que no sabías que hacer con tu vida – Recuerdo
haberlo dicho una vez, pero eso fue hace mucho tiempo y lo dije cuando pensaba
en… NO NO olvídalo… suspiré y
respondí
– Si dije eso, pero no me refería a ser un idol… además porque te
preocupas tanto por mí –
-Es
porque somos amigos ¿verdad? – Me sonrió – Emm… – no pude contestarle porque no
recuerdo haberlo hecho mi amigo, solo hablaba con él cuando tenía alguna duda
en clase, él se acercaba a mí cuando estaba muy triste pero nunca lo consideré
un amigo mío.
- Bueno… Que dices entras o no
-No
lo sé… - Dije un poco decaído, él me miró un tanto
preocupado por mi expresión
-¡Vamos! No tienes nada que perder, será divertido… Ummmm ya sé yo te
acompañaré no soy tan bueno como tu pero lo intentaré – Me agarró por los
hombros y me agitó mientras reía.
Lo miré y accedí para que
deje de molestar – Esta bien… ¿Pero
cuando iremos si es en hora de clases?-
-Vamos justo ahora, los primeros tienen más oportunidad de entrar
-¿¡Quieres
que nos escapemos de clases!?
-
Ehhhh… Sí, pensé que era obvio. ¡Vamos rápido! – Me agarró
nuevamente por el brazo y corrimos hacia la salida.
Nunca pensé que ese día
llegaría ser tan cansado, bueno… por lo menos podré distraerme de mis
problemas…
O eso creí.
-FIN CAPÍTULO 1-
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